Solo tú enciendes las luces de mi alma
que incesantes me alumbran
en los momentos más oscuros.
En tus ojos descubro la magia angelical
que alimenta con ternura desmedida mi ser;
en tu preciosa voz el encanto más sublime
que me envuelve de esperanza.
Amor indeleble me entregas,
de dulzura perpetua me envuelves
mi pequeño y valiente luchador.
Noches infinitas visitas mis sueños
con tu inocente y dulce sonrisa;
cada palabra tuya
se convierte en una sutil
caricia de la vida.